En condición de local, el Canalla cayó por 4 a 0 ante el Taladro y sigue sin poder triunfar en la Superliga. Llega debilitado a su encuentro por Copa Argentina, ante Boca Juniors.
Banfield le dio un mazazo a Rosario Central. Aprovechando la jerarquía de sus atacantes y la solvencia defensiva, la visita fue notablemente superior a la Academia y extendió su gran momento.
El triunfo, sin atenuantes, deja atrás la postura que el fútbol argentino había asignado a Julio César Falcioni. Salió a atacar desde el minuto cero, tuvo el balón durante gran parte del partido y no sufrió.
Quien se encargó de abrir el marcador fue Darío Cvitanich, la excluyente figura en el Gigante de Arroyito. A los 20′, recibió en el borde del área, realizó una gambeta fenomenal y definió de zurda contra el poste izquierdo de Rodríguez. Sacó a relucir su calidad.
Diez minutos después, otra vez el ex Boca sería el encargado de estirar la ventaja. Esta vez mediante el disparo desde el punto penal.
El complemento no sería distinto. Banfield encontraría más espacios aún y aprovecharía la situación a la perfección. A ello, se sumaron las deficiencias defensivas del local, sobre todo, de la zaga central. Fernando Tobio tuvo un debut muy flojo con la Albiazul y José Leguizamón también tuvo un rendimiento bajo. Fue justamente este último el que se durmió en el tercer tanto del Taladro: Cvitanich lo cuerpeó lícitamente y asistió a Mouche, que liquidó la contienda.
Quien se decoró el marcador fue un ex Newells: Mauricio Sperdutti. Mouche lo dejó mano a mano frente a Rodríguez y el «Gordo» definió cruzado para poner el 4 a 0 definitivo.
Banfield sumó su tercer triunfo en el campeonato y alcanzó las nueve unidades, quedando en la tercera ubicación. Tratará de extender esta racha la próxima jornada, cuando reciba a Arsenal.
Rosario Central, tras tres empates consecutivos, perdió el invicto en la Superliga. Llega con el autoestima baja para disputar los octavos de final de la Copa Argentina, ante Boca Juniors, el día miércoles.
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