El nadador Guillermo Bértola, quien estuvo internado en los últimos días en el Hospital Cullen por problemas de salud, firmó el alta voluntaria en el Hospital Cullen hizo todo para poder competir en el día de hoy, pero finalmente no pudo. En diálogo con LT10, el cordobés contó: «Es un sabor amargo. Tenía muchas ganas de competir. Estoy con un poco de bronca, pero escuchando el cuerpo, debo recuperarme. Estuve bastante mal, casi hago una locura, porque el domingo firmé un alta voluntaria para probar el lunes en la pileta, y cuando me tiré sentía mucha tristeza porque sabía que no estaba en condiciones, el cuerpo no estaba igual que el jueves, cuando fue el sprint; me di cuenta que no estaba competitivo».
«Estoy bajo controles, lo van a determinar los cultivos de orina y sangre, por el momento descartaron un montón de enfermedades graves, me hicieron una punción para descartar meningitis, tuve presión alta, me desmayé, y pegué fuerte con la cara. Me asusté mucho, por suerte la organización de la Santa Fe-Coronda siempre estuvo conmigo, al igual que los doctores del Hospital Cullen», agregó Bértola.
Para finalizar: «Estoy muy agradecido con todos. Ya estoy en Córdoba, cuidándome, y pensando en mi propio objetivo»
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