En la ida de la segunda fase de la Copa Libertadores, la T derrotó al conjunto brasilero por 2 a 0 y quedó bien parado para la revancha, que será el próximo miércoles.
En lo que fue su retorno a competencias internacionales luego de 17 años, Talleres no solamente estuvo a la altura fuera de la cancha con un terrible recibimiento, si no que también logró un gran triunfo ante uno de los equipos más grandes del continente. La apertura del marcador fue el factor clave del encuentro: a partir de allí, los cordobeses tomaron confianza, encaminaron el desarrollo a su favor y se llevaron un resultado bárbaro.
En la primera parte, Sao Paulo estuvo mejor parado que Talleres. Con Nené y Reinaldo, uno por cada banda, inquietó a la defensa aunque le costó encontrar profundidad. Talleres solo dependió de Sebastián Palacios, quien buscó mediante arrebatos individuales.
En el complemento sucedía poco, hasta el minuto doce. Allí, Juan Ramírez bajó un balón en el borde del área, la dejó picar y metió un bombazo de zurda que se incrustó en el ángulo izquierdo de Thiago Volpi, que voló pero no llegó ni siquiera a tocar el balón.
A partir de allí, Talleres creció en el juego y Sao Paulo experimentó lo contrario. Los locales fueron conscientes de esta situación y se animaron a ir por más. Luego de una serie de toques donde participaron Cubas y Guiñazú, Pochettino se mostró y realizó una gran pared con Junior Arias: el juvenil finalizó la jugada con un disparo rasante para poner el 2 a 0.
Talleres logró un gran triunfo para poner un paso en la tercera fase. Allí, podría enfrentar a Palestino de Chile o Independiente Medellín.
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