Luego de quince encuentros sin ganar, el Ciclón rompió la racha al vencer a Junior por 1 a 0 en la segunda fecha de la fase de grupos de la Copa Libertadores.
No se auguraba un buen ambiente en el Nuevo Gasómetro. Inmerso en una dura crisis producto del mal inicio de año, San Lorenzo necesitaba reencontrarse con la victoria no solo para acomodarse en la Copa Libertadores, si no también, y por sobre todas las cosas, recibir una inyección de vitamina para lo que resta de la temporada. Tuvo un buen partido superando a Junior, pero hoy, el resultado termina imponiéndose por sobre el análisis.
El desarrollo de la disputa se quebró a los 29 minutos de juego, cuando Gabriel Fuentes se fue expulsado por una agresión sobre Víctor Salazar. A partir de allí, el juego se inclinó a favor del Ciclón, que en la primera mitad no encontró la profundidad. En ningún momento logró dejar de cara al gol a Nicolás Blandi.
En el complemento, San Lorenzo tuvo más claridad y logró inquietar a su rival. El más activo de todos fue Román Martínez, quien a doce minutos del final dejó su rol de creador, pisó el área y fusiló a Viera para desatar la locura de la gente que se aproximó hacia el Bajo Flores.
Antes del gol, el duelo estuvo interrumpido por un corte de luz, por lo que se disputó hasta el minuto 114. Sobre el final, con Junior desordenado, San Lorenzo pudo liquidarlo, pero no estuvo fino en la definición.
Con este triunfo, el Ciclón tiene cuatro unidades y es escolta de Palmeiras en el grupo H de la Copa Libertadores.
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