La gente de Colón nunca quedó conforme con el juego del equipo de Lavallén, aunque obviamente valoró llegar a una definición internacional. Orlando «Mono» Claut es el ayudante de campo del ex DT Sabalero. «No fuimos valorados como tendría que haber sido. Hicimos historia. Llegar a una final de un campeonato sudamericano…», remarcó en la charla con Rodrigo Rosetti. «El objetivo de jugar una final se logró», remarca… aunque se lamenta.
Sobre su paso por el Sabalero como Ayudante de Campo, Claut recordó: «En Colón tenía el banco al lado de la gente y nos puteaban, puteaban…en el partido con Gimnasia que ganamos 2-1. Estábamos casi en la final de la Sudamericana y puteaban. ‘Y Lavallen y vayansé…’ No lo aguantaba más. Le dije al de seguridad si no podía hacer nada? Y ahí metimos el gol y le digo ahora gritás la c… todo un insulto. Me tuvieron que agarrar, pero es algo muy injusto. Lo sentía muy injusto a todo lo que pasaba. Dos o tres tarados que arrancan y se suman. Esas cosas me joden mucho y justo daba que el banco de suplentes está al lado de la platea. Cuando pasó eso era muy injusto. Nos dijeron que era gente de la oposición, no lo sé«, recordó.
Sobre el mismo tema, Claut advirtió que «esto no nos pasó en otro lado, ni en Belgrano, solo ahí en Colón. Veníamos acumulando toda una interna en el club. Teníamos todo en contra. Estábamos jugando casi una final y estábamos avanzando etapas, estábamos bárbaros luchando con muchas cosas dentro del club. Fue una acumulación de cosas y no me gustó como se decían las cosas y los insultos«.
«No fuimos valorados como tendría que haber sido. Hicimos historia. Llegar a una final de un campeonato sudamericano… Colón no había llegado en toda su vida. Cuando jugás el campeonato internacional, dejas de lado la competencia local. La mente juega mucho en ese sentido y dejas de lado la competencia local», advirtió Claut.
En otro tramo, el «Mono» recordó que «nosotros pusimos los objetivos y todo. No había GPS y pusimos los GPS. Acondicionamos el gimnasio. Tratamos de hacer cosas diferentes y lo conseguimos con el grupo. Lo otro no estaba. Llegamos y nos decían que los jugadores estaban cómodos. Era como que nada, vienen a hacer la plancha los jugadores. Y nosotros tratamos de ser diferentes y lo conseguimos. Lo otro no estaba. La dirigencia no entraba… pero ese grupo fue increíble».
Sobre sus inicios confesó que «estábamos cómodos dirigiendo inferiores de River hasta que Pablo me dijo si lo acompañaba a dirigir algún club. Le dije que sí y surgió lo de San Martín de San Juan. Te aseguro que los inicios fueron muy sufridos. Yo rogaba por favor para que no nos metieran un gol. y no perdiéramos porque perdés tres o cuatro partidos y te sacan y no volvés a dirigir más en primera. Lo vivía con mucha intensidad el corazón me explotaba. gracias a Dios no fue bien y ahí me relajé un poco más. lo vivo muy intenso a los partidos
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